martes, 13 de septiembre de 2016

Eran los mejores amigos en el orfanato

No importa el tiempo ni la distancia… Hay amistades que son para toda la vida, así lo demostraron unos niños de origen chino que se reunieron en Dallas, luego de ser adoptados por unas familias estadounidenses. El año pasado Andy y Sharon Sykes de Plano, Texas adoptaron a una niña llamada Hannah de un orfanato en Changsha, China. Durante el proceso de adopción, la pareja recibió unas fotografías de su hija en el hospicio y descubrieron que en la mayoría de las imágenes aparecía al lado de su mejor amigo, un niño de nombre Dawson.

Por un lado, los Sykes estaban felices por la nueva integrante de su familia, pero otro, estaban tristes, pues con la adopción de Hannah, los niños se separarían y quizá nunca más se volverían a ver. Cuando visitaron China para completar la adopción de su hija, se dieron cuenta del lazo especial entre los niños y decidieron que tenían que hacer algo para no alejarlos. “Cuando nos dieron un recorrido por el albergue pensé: ‘Oh por Dios, no podemos dejar a este niño en China’”, dijo Andy a FOX 4 Dallas.

Para que no romper la amistad de los pequeñitos, Andy y Sharon publicaron su historia en Facebook, con la esperanza de encontrar una familia para Dawson, cerca de Texas. El plan tuvo éxito, pues una semana después de compartir la tierna historia de amistad, Christopher y Amy Clary, de Lewisville, decidieron adoptar a Dawson. 


Tras meses de papeleo y trámites, al fin la semana pasada se dio el tan anhelado encuentro. Los Sykes se encontraron con los Clarys en el Aeropuerto Internacional de Dallas Fort-Worth para darle la bienvenida al pequeño a los Estados Unidos y filmaron la adorable reunión entre los niños, luego de 11 meses de separación. En el video, se observa como Hannah, de cuatro años, y Dawson, de tres, no dejan de abrazarse y sonreír, ¡no podían creerlo! “Se han de haber abrazado como 400 veces. Se abrazaban tanto que hasta se caían”, dijo la señora Clary a CBS. “Estuvieron así unos 20 minutos”, agregó el señor Sykes.  

Hannah y Dawson llegaron al orfanato cuando tenían tan sólo unos meses de edad. Hannah fue abandonada por su familia debido a que nació con labio leporino, mientras que los padres de Dawson decidieron dejarlo porque no podían cuidar de él, ya que tiene un padecimiento que produce fluidos en su cerebro. Ambos se hicieron muy unidos porque compartían la misma ‘mamá de fin de semana’, una madre sustituta que cuidaba de ellos durante los sábados y los domingos.

Atrás han quedado esos días de abandono, pues ahora los niños forman parte de numerosas familias que los colman de amor y cuidados. Hannah tiene dos hermanos mayores, Cooper y Mack. En tanto, Dawson tiene un hermano y dos hermanas que cuidarán de él, y lo mejor de todo es que su best- friend vive a sólo cinco minutos de él.

FUENTE: HOLA USA