India reforzará el sistema de adopciones para acabar los delitos relacionados a la apropiación de bebés, como los de la agencia Fastrack International que vendió niños por 8 mil dólares antes de ser desmantelada en junio pasado.
Tras su desarticulación, se comprobó que esta agencia vendió en unos meses 23 niños y planeaba vender al menos 76 más, al registrar entre sus archivos esta cantidad de “transacciones” en curso, para lo cual contaban con la complicidad de médicos y enfermeros que secuestraban a los menores en hospitales. Ante este hallazgo, las autoridades plantean simplificar el procedimiento de adopción para lo cual crearán un registro de seguimiento nacional en línea. La ministra para las Mujeres y el Desarrollo de los Niños en la India, Maneka Gandhi calificó como “vergonzoso” hacer esperar años a los padres por una adopción, cuando se ha comprobado que con el pago de 8 mil dólares estas agencias entregaban a los niños de forma ilegal.
En India, más de 100 mil millones de niños desaparecen cada año, lo que representa 15 niños por hora, según las ONG. Con la modificación del sistema de adopción las agencias deberán registrarse e inscribir a los niños en una base de datos, lo que esperan sirva para que las personas dejen de “apropiarse de bebés” de formal ilegal.
Al respecto, el defensor de los derechos del niño en esa nación, Bhuwan Ribhu, alega que los indios tienen “miedo de seguir el proceso legal de adopción. Y es difícil perseguir a los grupos criminales organizados, y todavía más obtener su condena”.
En la India las agencias de adopción registradas son numerosas, sin embargo, el procedimiento para obtener legalmente un niño puede durar hasta dos años por lo que el número de huérfanos y menores abandonados va en aumento, y de ellos pocos son adoptados.
Mientras tanto, continúan las desapariciones de niños en hospitales, estaciones de ferrocarriles y grandes ciudades como Bombay, donde 2 mil 751 menores estaban siendo buscados en 2014, según datos la Agencia de Personas Desaparecidas.